¡Acompañanos a Honrar la Vida!

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27078259

Sede Central

Hospital de la Mujer Dra. Paulina Luisi, Piso 2

Testimonios

inspiradores

A mi me tocó estar del otro lado como paciente y estuve sola. Acompañar y servir a alguien agranda el corazón. Es sin duda la labor más gratificante del mundo. Hoy me siento orgullosa de honrar la vida.
Pamela, madrina
Fue fabuloso para mí reunirme con tantas mujeres maravillosas y compartir nuestras vivencias y aportar en algo para quienes padecen la enfermedad por la cual yo también pasé. Agradezco y admiro la labor de las madrinas. La pandemia no nos dejó reunirnos más pero eso no fue impedimento, seguimos conectadas y seguimos tejiendo y aumentando año a año las montañas de mantas, nuestras manos están en todos los rincones de Uruguay.
Cristina
Llegué a la fundación porque me interesó mucho el poder brindar un granito de arena, para aliviar en parte tanto sufrimiento a distintas pacientes que estaban pasando momentos muy difíciles de salud.
Daniela
Me siento cada vez más unida a la causa y tejiendo con más ahínco para acompañar y cobijar a quienes atraviesan una situación de enfermedad como yo atravesé años antes. Honrar la Vida endulza mi existencia.
Gladys Geymonat
Se puede seguir luchando día a día con la magia que da este *dar de darse* para esta causa donde con colores damos calor a tantas pares que luego son abrazadas por nuestras mantas. Gracias por seguir tan noble misión.
Silvia, tejedora y paciente
Conocí a la fundación, como muchas, por una entrevista a Zulma en la TV. Me comuniqué enseguida y me puse a hacer cuadrados de crochet! Fue en el 2019, yo había pasado por un cáncer de útero en el 2006 y se lo que es estar internada lejos de la familia, y lo importante que es recibir un mimo de alguien aunque no te conoce!
Dinohra
Hace 4 años participo con un grupo haciendo algo maravilloso que es tejer para esas mujeres que necesitan un cariño de abrigo y cuidados. Me siento bendecida por haber conocido a Honrar la Vida. Si Dios quiere el 19 llegaré a la capital para compartir con todas.
Olga María, tejedora y paciente
Mi pequeño aporte de color, calor y cariño me ha permitido conocer a mujeres de todos los rincones del país, unidas en la misma misión: abrigar los sueños y las esperanzas de quienes lo necesiten. Gracias por permitirme ser parte.
Margarita, tejedora
Mirando TV fue como conocí a Zulma y a la fundación Honrar la Vida. Lo que ví me emocionó mucho, y desde ahí comencé a tejer los cuadritos, que en cada vuelta iba un fuerte abrazo, un mejórate pronto, desde acá estoy contigo... Ahora integro este hermoso grupo, me siento acompañada también porque vivo en el campo donde trabajo con mi esposo. Gracias infinitas, y a seguir tejiendo x la vida.
Carmen
Con Zulma nos conocimos en las panzas de nuestras madres. Nos reencontramos de grandes, y fue hermoso. Ella me invitó al Hospital, y allí le propuse dar clases de tejido los viernes, y la verdad ..fue maravilloso! Encontré gente hermosa! Espero algún día volver a las clases. Gracias Honrar la vida.
Silvia Ebbero
Participo tejiendo mantas para Honrar la Vida, por haber pasado un tumor de mama muy difícil, superado creo hace nueve años. Sigo controlada, mi médico dice : "salís adelante por las ganas de vivir que tenés". Tengo 79 años, la sigo peleando hasta que Dios me lo permita.
René Acuña, tejedora
Hace unos años soy madrina de compañía de Honrar la Vida. Siempre tuve en mi mente el voluntariado, y un día, gracias a las palabras de una amiga que hoy no está entre nosotros, conocí a "Honrar". Para mí alcanza esa palabra para abarcar un mundo de cosas. Sensaciones, intercambio, emociones. El tiempo que comparto con las pacientes (no es sólo dar), es de mucha calidad. Recibo mucho más: amor, sonrisas. Extraño el abrazo, pero va a volver. Muchas gracias a todo Honrar la Vida.
Silvia
Una vez que la jubilación llegó a mi vida, quise que siguiera teniendo tanto sentido como mi vida laboral. Busqué, busqué... y vi por la tele a Honrar la Vida. Probé y encontré una razón para ver que siempre se puede hacer algo que nos haga Honrar la Vida. Es mi segunda familia, es el lugar donde comparto mi ser con gente linda. ¡¡Me agranda el corazón!!
Beatriz A., madrina de Honrar la Vida
Un día me agregaron a el grupo de tejedoras (“arañitas”, como nos llamamos entre nosotras) en Tejiendo por la vida . Y yo muy contenta de poder dar un poquito de alegría, cariño, calor y color a esas mujeres que están pasando por ese mal momento . Que Dios bendiga nuestras manos para que podamos seguir Tejiendo por la Vida.
Alicia
A mi me tocó estar del otro lado como paciente y estuve sola. Acompañar y servir a alguien agranda el corazón. Es sin duda la labor más gratificante del mundo. Hoy me siento orgullosa de honrar la vida.
Pamela, madrina
Hacía mucho tiempo que necesitaba poder trasmitir , ya que soy paciente oncológica, mi experiencia, donde la actitud, la prevención con los controles indicados y el auto examen, favorecen el tratamiento a tiempo. Y donde siento que puedo ayudar, acompañar con esa actitud, es en el hospital. Tener la empatía, de mirar a las pacientes y decirles "sí se puede" " vamos que podemos", "quiérete, por tí y por los tuyos". Y dar un gran abrazo, para coronar ese amor que le ponemos a nuestra tarea. Es un orgullo poder ser Madrina.
Zulma M.